El pitido final en Miami no hizo más que confirmar una idea que se viene construyendo hace ya un tiempo. Con un presente espectacular en la Major League Soccer (MLS) y la primera aparición de la franquicia en la final de la Concacaf Champions Cup, ya no se puede negar que Vancouver Whitecaps es el equipo del momento en Norteamérica.
Los canadienses lideran su conferencia con cinco puntos de ventaja sobre su máximo perseguidor -Portland Timbers-, son el equipo menos goleado de toda la MLS -junto con New England Revolution- y promedian dos goles por encuentro.
Además, han comenzado a ponerle el merengue a un postre que podría ser el más dulce de su temporada. Los Whitecaps golearon 5 a 1 en el global al Inter Miami de Lionel Messi, y con eso aseguraron su clasificación a la final de Concachampions, la primera vez que los dirigidos por Jesper Sorensen logran esto.
Un equipo que no perdona
Vancouver es un equipo que simplemente no tiene piedad en frente del arco. Si bien ante Inter Miami podrían haber convertido más goles, la gran capacidad de anotar que tienen algunos de sus principales jugadores del ataque y del mediocampo a veces abruma a equipos de nivel similar.
Los de Sorensen crean muchas situaciones por encuentro, pero sin perder de vista el orden defensivo, algo que les permite llegar rápidamente al área rival con opciones para el pasador.
Un doble 5 de selección
Este será un abierto lobby para Gerardo Pochettino, entrenador de la Selección de los Estados Unidos, considere a Sebastian Berhalter, uno de los mediocampistas de este equipo de Vancouver, para su selección nacional.
Hijo de Gregg, ex seleccionador, con tan solo 23 años ha tenido un crecimiento futbolístico en los últimos años que le permitió adueñarse de un centro del campo que tiene bastante recambio.
Pero no está solo. Andrés Cubas, titular también en la Selección de Paraguay, es el motorcito en la recuperación de los canadienses, y uno de los mejores jugadores del plantel.
El goleador, Brian White
Sorprende los números que ha logrado White esta campaña. En 16 partidos jugadores esta campaña entre la MLS y la Concacaf Champions Cup, el estadounidense convirtió 11 goles. El equipo no depende de su cuota goleadora, pero sin dudas los posiciona mejor que el esté dentro del campo de juego.
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