iovani Lo Celso es muy hincha de Rosario Central. De chico fue mascota del equipo, luego alcanzapelotas y debutó en Primera con Eduardo Coudet como entrenador en el 2015. De grande continúa mostrando su amor, siguiendo los partidos del Canalla, donde su hermano Francesco luce la 18 y también yendo al Gigante: fue homenajeado luego de la Copa América. De su idolatría por Ángel Di María con una anécdota imperdible a llevar a su hija, de apenas un año y medio, a Arroyito.
-En tu adolescencia decías que Di María era tu ídolo y que en lo único que se parecían era en que los dos son zurdos. ¿Seguís pensando lo mismo?
-Me acuerdo la nota, cuando era más pibe lo dije... Para los jugadores de Central, porque él salió de ahí, verlo en el Real Madrid ganando la Champions, triunfando en los mejores clubes de Europa, era un orgullo... El jugador de Inferiores se reflejaba mucho en él, quería ser como Fide. Ya después la vida me fue llevando a lugares diferentes, me acuerdo de una vez que Ángel estaba de vacaciones en Rosario, que yo todavía no había debutado en Central, que me fui directamente a la casa a pedirle una foto. Me enteré de que estaba y fui... Y después tenerlo como compañero en el París y ya hacer una relación de amistad... Entonces, bueno, creo que eso es lo lindo que tienen la vida y el fútbol: los aprendizajes. Obviamente que eso no tiene techo. De pasar de pedirle una foto como ídolo a estar compartiendo un asado, compartiendo una cancha, ganando trofeos juntos, entrenando todos los días, es algo muy lindo.
foto chris
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